En tan solo 15 minutos podrás tener preparada una receta italiana perfecta para resolver cualquier merienda o cena
Incluso para las personas que más disfrutan cocinando, tienen momentos en los que el tiempo de cocinar es breve o incluso estamos cansados y no apetece. Pues el tiempo que nos pasemos en la cocina durante el finde a veces, debe ser el mínimo posible.
Esas cenas o meriendas de domingo suelen ser los momentos perfectos para tirarte en el sillón a descansar por lo que apañar la cena con un bocadillo en apenas quince minutos puede ser el plan perfecto. Por eso, este bocadillo de origen italiano puede ser perfecto, aunque siempre podemos variar sus ingredientes según la época del año en la que nos encontremos. En este caso utilizaremos el dulce de membrillo.
Se trata por tanto de un bocadillo crujiente de mozzarella in carrozza con membrillo. Para prepararlo tan solo necesitaremos pan, una bola de queso mozzarella y un buen dulce de membrillo. Aunque siempre puedes sustituir la mozzarella por un queso que te guste más o que tengas por casa.
Y no tienes que preocuparte por la combinación del queso con el membrillo, por que el membrillo admite casi todos los quesos dando una combinación deliciosa. Ya que, la gracia de la receta principalmente es el contraste entre el queso y el membrillo.
Elaboración
Este bocadillo, es sin duda algo especial. Ya que debemos empapar ligeramente el pan en una mezcla de huevo y leche, y una vez que el bocadillo esté montado lo freiremos. Esto nos ayudará a darle un toque crujiente que lo hará mucha mejor opción.
Aunque sin duda, lo importante está en el relleno. Donde pondremos el membrillo junto con el queso que hayamos elegido. Este bocadillo, por tanto, es una versión evolucionada del clásico sándwich mixto.
El bocadillo de mozzarella in carrozza con membrillo se presenta como una opción deliciosa y rápida para los momentos en los que el tiempo en la cocina es limitado o incluso cuando la fatiga nos impide realizar preparaciones más elaboradas. La combinación de los ingredientes da un contraste entre la cremosidad del queso y la dulzura del membrillo.
La preparación, aunque requiere un toque especial al empapar el pan en huevo y leche antes de freírlo, resulta accesible para aquellos que buscan una alternativa al clásico sándwich mixto. En definitiva, este bocadillo es una elección sabrosa y versátil que se adapta a diferentes momentos y preferencias culinarias.