En verano nos gusta tomar el aperitivo mientras disfrutamos de nuestro merecido descanso, ficha estas ideas fáciles y que te harán adelgazar.
En España somos muy de disfrutar al sol con los amigos y la familia de un rico aperitivo, a todos nos gusta sentir esa sensación de estar de vacaciones mientras tomamos un pequeño tentempié antes de la comida, ya sea en la piscina, en la playa o en un bar o cafetería. Sin embargo, el problema de estos aperitivos es que suelen ser muy calóricos y nos hacen engordar, algo que a muchos asusta por lo que deciden cancelar este plan.
Es una verdadera lástima no poder disfrutar de este plan tan encantador solo por le hecho del miedo a engordar, no debería ser así por eso hoy te traemos sencillas ideas para disfrutar de un rico aperitivo sano y saludable que puede ayudarte incluso a perder esos kilos mientras disfrutas de una quedada con amigos sin apenas calorías.
Sano, fresco y muy fácil de preparar así es el primer aperitivo que te presentamos a base de hummus, la mezcla de moda y de origen libanes a base de garbanzos y tahín. Acompáñalo de crudites de verduras como zanahoria, apio o pepino cortados en finos y largos bastones para disfrutar bien este verano.
Además, los garbanzos son saciantes y conseguirás mantenerte lleno durante más tiempo-
Te proponemos que hagas tu propio guacamole casero a base de aguacates maduros, lima y cilantro para aportarle ese punto fresco y de mucho sabor. Puedes acompañarlo con nachos caseros, siempre son una mejor opción que los de bolsa. Corta tortillas de maíz en triángulos y hornéalos hasta que estén dorados, puedes pintarlos con un poco de aceite y agregarle pimentón para ese punto picante.
Esta tercera opción es muy colorida y puedes prepararla junto a tus peques. Usa brochetas de madera e intercala tomates cheeries y pequeñas bolas de mozzarella como su fueran una guirnalda. Puedes acompañarlas con una fácil salsa al pesto hecha a base de albahaca, piñones y aceite para aportarle un toque distinto.
Nuestra última opción es un aperitivo dulce, más a modo de postre. Coge unas fresas grandes y rojas e introdúcelas en una mezcla de chocolate negro puro del mayor porcentaje de cacao que encuentres. Ojo, siempre que sea sin azúcar. Ponlas en la nevera hasta que la cubierta esté sólida y ya están listas para comer.
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