Incluyendo esta verdura en nuestra dieta, en poco tiempo notaremos una pérdida de peso gracias a sus múltiples beneficios.
La llegada de la primavera y del buen tiempo en muchas ocasiones es una motivación para ponernos en forma y para perder esos kilos de más que hemos acumulado durante el invierno. Para ello, hoy proponemos una dieta con una verdura que nos ayudará a perder hasta tres kilos en muy poco tiempo.
Vaya por delante que la mejor forma de iniciar una dieta es acudir a un profesional para que nos asesore y nos guíe en el proceso. De esta forma sabremos qué nutrientes son necesarios y qué debemos eliminar de nuestra rutina.
Sea como fuere, la dieta que traemos hoy está basada en la inclusión en tu dieta de la alcachofa. Esta verdura de origen africano, pero ampliamente extendida por todo el Mediterráneo es muy apreciada en la cocina por sus propiedades y su versatilidad. Y es que lo cierto es que la dieta de la alcachofa tiene muchas propiedades entre las que destaca su alto contenido en fibra, la vitamina B y minerales como el calcio, el potasio o el magnesio.
La alcachofa mejora el tránsito intestinal, ayuda al cuerpo a depurar con sus propiedades diuréticas y gracias a su contenido en fibra da una sensación de estar saciados que nos ayudará a reducir la ingesta de calorías.
La dieta de la alcachofa consta de tres partes en las que iremos modificando nuestra rutina alimenticia para incorporar esta verdura a nuestra ingesta habitual. Primero comenzaremos por lo que se podría llamar como fase de depuración. En ella se busca ayudar al sistema a limpiarse de toxinas. Para ello tomaremos crema de alcachofas o alcachofas al vapor así como té verde. Esta fase dura tres días.
La segunda etapa es la fase de mantenimiento, que durará otra semana. En ella, tras el periodo inicial en el que hemos consumido pocas calorías ahora aumentaremos la variedad, tomando espinacas, una ensalada de alcachofas o salmón al horno con alcachofas salteadas. El té verde también nos irá bien.
Por último llega la fase que se conoce como etapa de integración. En ella se trata de incorporar de manera definitiva la alcachofa a nuestra rutina. Para ello haremos platos como la pasta integral con pesto de alcachofa o la coliflor con alcachofas.
De esta forma, en pocos días veremos como la báscula nos da un alivio. Si además realizamos ejercicio diario y bebemos hasta dos litros de agua diarios, los beneficios serán mucho mayores.
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