Deshidratado vs. natural: exploramos las diferencias nutricionales entre fruta seca y fresca, una pregunta que muchos se hacen es si ambas son igualmente saludables.

Es muy común encontrar frutos secos, un alimento que suele incluirse en los planes nutricionales, pero qué cantidad consumir realmente es la cuestión de las dudas.
Se podría pensar que la fruta seca es tan saludable como la fruta “normal”, pero ¿es realmente así? La revista Runners World, especializada en deportes, lo ha preguntado a Sander Biesbroek, científico de alimentos y profesor asociado en la Universidad de Wageningen.
Secado de frutas y secado normal: ¿en qué se diferencian?
Muchos expertos aconsejan comer dos porciones de fruta al día. Para este fin, ¿se pueden optar también frutos secos o son menos saludables que la fruta normal?
La presencia de frutos secos en los supermercados, desde pasas sultanas hasta albaricoques secos, plantea una pregunta común: ¿son tan saludables como la fruta fresca? La principal razón para secar la fruta es prolongar su vida útil, eliminando la humedad que propicia el crecimiento de bacterias y moho, permitiendo su almacenamiento por semanas o meses. El proceso requiere una temperatura de secado específica para ser rápido y eficaz, según explica Biesbroek.

Sin embargo, esta alta temperatura es también la mayor desventaja. La vitamina C, particularmente sensible al calor, se pierde por completo durante el secado, un punto crucial a considerar en su valor nutricional. Afortunadamente, otros minerales y fibras se conservan, manteniendo una parte importante de su perfil saludable.
Otro aspecto importante es la concentración de azúcar. La fruta fresca contiene una cantidad significativa de azúcar, pero también mucha agua. Al secarse, casi todo el contenido líquido se evapora, dejando una versión más concentrada de los azúcares naturales. Esto significa que un puñado de fruta seca puede contener una cantidad considerablemente mayor de azúcar que la misma cantidad de fruta fresca, lo que lleva a un consumo rápido y potencialmente excesivo.
A pesar de la pérdida de vitamina C y la concentración de azúcar, los frutos secos siguen siendo un refrigerio saludable debido a su contenido de minerales y fibra. No obstante, el Centro de Nutrición aconseja moderación. La recomendación es limitarse a un puñado diario, complementando el resto de las necesidades de fruta con productos frescos. De esta manera, se garantiza la ingesta de vitamina C y se controla el consumo de azúcar, logrando un equilibrio nutricional óptimo.