Los riesgos de sufrir enfermedades cardíacas son muchos, pero los expertos explican que con una sencilla actividad se pueden reducir de manera fuerte.
Lauren Elson, experta en medicina física de Harvard, explica a National Geographic cómo reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, compartiendo varios estudios realizados por la Universidad estadounidense y publicados en su informe Walking for Health.
Una actividad tan sencilla como caminar, el movimiento más primario del ser humano, es el secreto para una vida más larga y saludable: las últimas investigaciones demuestran que estar sentado puede ser más perjudicial para la salud que fumar. Esto lo explica Lauren Elson, experta en medicina física y asesora de la Harvard Health Publishing «Caminar de 20 a 30 minutos al día puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas en aproximadamente un 30%».
Cuanto caminar ayuda la salud
Caminar esconde un arsenal de beneficios que van mucho más allá de lo que imaginamos: el estudio no solo confirma su eficacia para combatir el sedentarismo, sino que revelan su sorprendente capacidad para influir en nuestra biología, genética y bienestar general.
Las investigaciones publicadas en Medicine & Science in Sports & Exercise demostraron que tan solo caminatas cortas cada media hora pueden compensar los daños del sedentarismo: en el estudio con adultos de mediana y tercera edad que permanecieron sentados durante ocho horas diarias, se observó que cinco minutos de caminata cada 30 minutos reducían los picos de glucosa en sangre hasta en un 58%. Además, la mayoría de los regímenes de caminata disminuyeron la presión arterial sistólica y mejoraron el estado de ánimo, reduciendo la fatiga. Estos hallazgos subrayan que la ciencia lo confirma: caminar es una herramienta terapéutica que regula funciones esenciales del organismo.
Los beneficios de caminar se extienden incluso a nuestra genética, como revela el estudio de Harvard, que analizó 32 genes vinculados a la obesidad en más de 12.000 personas: quienes caminaban con energía al menos una hora al día reducían a la mitad el impacto de estos genes en su peso corporal.
Pero la lista no termina ahí. Estudios de la Universidad de Exeter han demostrado que una caminata de apenas 15 minutos puede aplacar los antojos por el chocolate, actuando como un reeducador para el cuerpo y la mente, invitando a elecciones más saludables sin necesidad de prohibiciones estrictas. Caminar también es un aliado formidable para la salud de nuestras articulaciones: investigaciones confirman que caminar entre 8 y 10 kilómetros semanales no solo alivia el dolor por artritis, sino que puede prevenir su aparición.
Caminar es un potente estimulante para el sistema inmunológico. Un estudio con más de mil participantes reveló que quienes caminaban al menos 20 minutos diarios durante cinco días a la semana experimentaron un 43% menos de días de enfermedad, y cuando enfermaban, sus síntomas eran más leves y la recuperación más rápida. Caminar activa de forma natural los procesos inmunitarios del cuerpo, sin efectos secundarios.
