La ensalada que despertará tus sentidos: prueba esta receta de quinoa primaveral, un plato fresco y muy sencillo para preparar.
Aunque popularmente se usa como grano, la quinoa es en realidad un pseudocereal. Esto significa que, si bien se consume como cereales como el maíz, el amaranto o la avena, botánicamente no pertenece a esa familia. Sus parientes más cercanos son la espinaca y la remolacha azucarera.
Ensalada de quinoa primaveral
La quinoa es reconocido como un superalimento: a pesar de su tamaño, sus semillas son una fuente nutricional potente, con un alto contenido de proteínas completas (contiene los nueve aminoácidos esenciales), fibra, vitaminas y minerales como hierro, magnesio y zinc. Es naturalmente sin gluten, lo que la convierte en una excelente opción para personas con sensibilidad o celiaquía. Versátil en la cocina, se utiliza en ensaladas, sopas y como acompañamiento, ofreciendo un sabor ligeramente a nuez y una textura suave que la hacen un ingrediente adaptable a múltiples preparaciones.
Ensalada de quinoa de primavera
Ingredientes
quinua: 1 taza
guisantes frescos: 1 taza
zanahorias medianas: 2
garbanzos cocidos: 1 paquete
Primero, lava una taza de quinoa para quitar cualquier residuo. Después, tuéstala en una olla, incorporando agua caliente y sal hasta que esté lista. Paralelamente, hierve una taza de guisantes y dos zanahorias cortadas en cubitos. Una vez que la quinua haya absorbido todo el líquido de cocción, pásala a un cuenco amplio. Incorpora la zanahoria rallada, los guisantes y los garbanzos (previamente escurridos). Aliña con aceite de oliva, sal y pimienta a tu gusto. ¡Ya tienes la base perfecta para tu ensalada! Ahora solo falta añadir tus ingredientes favoritos, como tomate, mozzarella o atún.
Cuando la quinoa esté lista y haya absorbido toda el agua, viértela en un bol grande. Agrega la zanahoria picada, los guisantes y una lata de garbanzos cocidos. Sazona con aceite, sal y pimienta. Esta es la base de tu ensalada; siéntete libre de complementarla con otros ingredientes como tomate, mozzarella o atún, según tu preferencia.
No te olvides que la quinoa es un ingrediente increíblemente versátil, apto para una gran variedad de platos, tanto dulces como salados. Es popular en ensaladas frías o templadas, combinada con vegetales, frutas, frutos secos y proteínas. Puede sustituir al arroz en risottos («quinottos») o paellas. En platos principales, funciona en salteados de verduras, como base para hamburguesas o albóndigas vegetarianas, y para rellenar vegetales. También enriquece sopas y guisos. Para desayunos y postres, la quinoa se transforma en nutritivos porridges, pudines y, en forma de harina, en horneados sin gluten. Incluso se utiliza en versiones innovadoras como el tabulé de quinoa o trufas dulces.
