La japuta, también conocida como palometa negra, es un plato que puedes hacer en 15 minutos y te aporta un gran valor nutricional.
Cuántas son las costumbres que España heredó del mundo árabe que se quedó instalado en una parte de Andalucía. La cifra puede ser casi infinita si uno empieza a hacer la cuenta. En esa herencia, por supuesto, está también el rubro gastronómico. Y en este artículo nos queremos detener en la famosa japuta, también conocida como palometa negra, un gran plato fácil de hacer y que nos aporta un alto valor nutricional para nuestro organismo.
La japuta o palometa negra es un tipo de pescado que se suele encontrar en aguas profundas, aunque sube en verano a la superficie para reproducirse. Como punto positivo, tiene un alto contenido en proteínas, mucho mayor a otros pescados. Aporta selenio, fósforo, potasio y yodo. Además, tiene mucha vitamina B12 y vitamina B6. Y, como si todo esto fuera poco, es muy fácil de cocinar en tu propio hogar. Nadie se resistiría a una buena japuta en adobo…
Ya señalamos que es muy sencillo preparar este plato. En apenas 15 minutos, se puede cocinar y disfrutar de todos los nutrientes. Además, es una buena excusa para que las niñas y los niños, sobre todo, coman algo más de pescado en su dieta, ya que se puede hacer de una manera similar a una milanesa.
¿Qué necesitamos comprar en el supermercado para llevar a cabo esta receta? Los ingredientes, pensando en raciones para cuatro personas, son los siguientes: una palometa negra grande, vinagre, un diente de ajo, una cucharada de pimentón dulce ahumado, media cucharada de orégano, un poquito de comino, pimienta negra, sal, aceite de oliva virgen extra y harina.
En sólo tres pasos, podemos tener este plato listo para disfrutar de una buena comida o cena. ¿Empezamos? El primer paso consiste en limpiar y trocear la japuta, colocándola luego en una fuente. El segundo paso es preparar el adobo. ¿Cómo se hace? Machamos los ajos en un mortero y los pasamos a la fuente del pescado. Añadimos el comino, orégano, pimienta negra, un poco de sal, un poco de aceite y el pimentón dulce. Luego, sumamos también un vaso de agua y lo dejamos así durante 24 horas.
El tercer y último paso consta de escurrir el pescado y rebozarlo bien con harina para freírlo en la sartén con mucho aceite, buscando que quede bien dorado.
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