La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) emite un aviso acerca del consumo de la cerveza con limón.
Si eres de los que prefiere beber la cerveza con limón, ¡atento! En un comunicado emitido el pasado miércoles, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte de que, aunque su graduación de alcohol es menor que las cervezas normales, el aporte calórico es notablemente mayor y el porcentaje de limón rara vez supera el 5%.
Una presencia cítrica muy testimonial que hace que, a pesar de ser más refrescantes y tener menos alcohol, su consumo sea bastante discutible para la OCU. Y es que, su sabor a limón proviene, básicamente, de saborizantes y edulcorantes, que no hacen sino aumentar el contenido calórico de estas cervezas, tan populares sobre todo en esta época del año.
En su comunicado, la OCU enumera el porcentaje de los diferentes tipos de cerveza de limón que existen en el mercado. El caso más llamativo es el de las cervezas tipo Shandy que, aunque tienen un contenido alcohólico inferior al 1%, no llevan cantidad alguna de limón. El sabor de este cítrico lo aportan solamente los aromas que tienen incorporados.
Por su parte, en las cervezas tipo Radler, que suelen contener entre 2 y 3,2 grados de alcohol, el porcentaje de limón varía notablemente, aunque en ningún caso supera el 5%. Por ejemplo, la marca Damm Lemon apenas cuenta con un 0,4% de limón; mientras que las firmas Radler Ambar y Radler Saerbrau llegan al 5%.
Este último tipo tiene también una mayor carga calórica, lo que, pese a tener un porcentaje de limón superior, le hace más perjudicial. Y es que, cuando los azúcares de estas cervezas se combinan con alcohol, incrementan notablemente el aporte calórico. En total, las Radler suman 145 kilocalorías por lata, un 12% más de calorías, de media, que una cerveza clásica. Por ello, lo mejor es tomar las Radler 0,0% que tienen 89 kilocalorías por lata, un 32% menos que una cerveza normal.
Por último, las cervezas de limón tipo Shandy acumulan una cantidad de 110 kilocalorías de media por lata, un 15% menos que una cerveza clásica, lo que las hace más saludables que las del tipo Radler, pese a no tener limón. En cualquier caso, la OCU recalca en su comunicado que, de todas las cervezas, “la opción más saludable, sin duda, es la versión 0,0%”.
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