Con sus fotos en las redes sociales y en los eventos importantes de cine y no solo, Eva Longoria demuestra estar en una forma física envidiable.

La ex estrella de Desperate Housewives luce una silueta compacta y músculos esculpidos, resultado de una disciplina rigurosa que combina entrenamiento, una alimentación saludable y tratamientos estéticos de vanguardia.
La rutina de entrenamiento de Eva Longoria: sin excusas
A los 50 años, y ya después de convertirse en madre de su único hijo, Santiago Enrique, Eva Longoria recuperó en tiempo récord su espléndida forma, demostrando que la edad no es un límite.

Con 1 metro y 55 cm de estatura, Eva Longoria es un concentrado de energía y tonicidad: su pasión por el fitness es evidente: nunca se salta su entrenamiento diario. Uno de sus aliados favoritos es el trampolín elástico, que combina diversión y alta intensidad. Al igual que su amiga Victoria Beckham, a Longoria también le gusta levantar pesas y correr en la cinta de correr, actividades ideales para quemar calorías y definir la musculatura. No es casualidad que, en un video publicado en mayo, acompañara su sesión de entrenamiento en el gimnasio con el lema «No pain, no gain», subrayando su constante compromiso.
Alimentación y tratamientos de belleza
Además del entrenamiento, el secreto de Eva también reside en sus hábitos alimenticios. La actriz es una cocinera experta y prefiere las recetas caseras con ingredientes frescos, y esta elección le permite tener un control total sobre lo que come, evitando alimentos procesados y ricos en grasas. Pero para mantener la piel compacta, no solo confía en el deporte y la dieta. La Reina de Hollywood es una fan de la radiofrecuencia de última generación, una técnica estética que mantiene los tejidos cutáneos jóvenes y firmes.
Como explica el médico estético Riccardo Midolo, la combinación de actividad deportiva y tratamientos específicos es fundamental para combatir el riesgo de flacidez cutánea, especialmente después de los 45 años. En este sentido, el médico recomienda la máquina Onda Coolwaves, un tratamiento no invasivo que utiliza microondas para regenerar y tonificar la piel. Al actuar directamente sobre el tejido conectivo y los lóbulos adiposos, ayuda a reducir la grasa localizada, la celulitis y la piel flácida, un resultado que Longoria muestra con orgullo.