Como muchos sabemos, algunos alimentos son una fuente natural de juventud y colágeno, una ayuda para una piel de porcelana y articulaciones de veinteañero.
Hablando de colágeno, hay alimentos que no pueden faltar en una dieta. El colágeno es una proteína esencial para la recuperación y el fortalecimiento de articulaciones, músculos y huesos. Mantener niveles adecuados es crucial para prevenir el envejecimiento prematuro de los tejidos. Podemos obtener colágeno de forma natural a través de diversos alimentos y otros alimentos pueden estimular su producción en nuestro cuerpo.
Los alimentos con colágeno que hay que comer
Una dieta equilibrada y basada en alimentos ricos en colágeno, es una ayuda importante para nuestro bienestar y también para nuestra belleza. Entre los alimentos con colágeno, fuente de juventud encontramos:
- Caldos naturales, de pescado como de carne, preparados con partes del animal ricas en colágeno, como huesos, patas de pollo o espinas.
- Carnes y pescados, estos ultimos contienen Omega 3, ácidos grasos que potencian los beneficios del colágeno (pescados blancos, salmón y trucha son los mejores).
- Gelatina: con el 90% que deriva de esta proteína.
- Huevos, sus membranas y la yema contienen colágeno, y además aportan vitamina E, vitaminas del complejo B, aminoácidos y azufre que contribuyen a su producción.
No hay que olvidar los estimuladores de colágeno, entre los cuales frutas y verduras, frutos secos, ajo y cebolla. El ajo y la cebolla son condimentos comunes que resultan valiosos por su contenido de azufre. Este mineral no solo favorece la producción de colágeno, sino que también mejora la circulación sanguínea en el cuerpo.
A pesar de su contenido en ácidos grasos Omega 3, 6 y 9, los frutos secos como las avellanas, almendras, pistachos o nueces son aliados importantes para estimular la síntesis de colágeno. Las frutas y verduras son esenciales para potenciar la producción de colágeno. Aquellas ricas en vitamina C, como los cítricos (limón, naranja, kiwi), no solo estimulan el colágeno, sino que también actúan como antioxidantes.
Las de pigmentación roja, como el tomate, los frutos rojos y el pimiento, contienen licopeno, otro estimulante. Además, la clorofila, presente en verduras de hoja verde como el brócoli o la col, también contribuye a este proceso. Se aconseja consumir varias porciones diarias de frutas y vegetales.
