Coloridas, ligeras y listas para el horno sin estrés: estos huevos al horno con verduras y feta son la cena ideal cuando quieres algo rico, sano y rapidísimo de preparar.
¿Cuántas veces llegas a la noche cansada, con hambre y sin ganas de cocinar? La tentación de abrir una comida precocinada es fuerte, pero bastan unos pocos minutos y tres ingredientes reales para resolverlo todo con sabor. Los huevos al horno con verduras y feta son la solución perfecta: no necesitas sartén, se montan directamente en una bandeja, y mientras se cocinan puedes relajarte o recoger la cocina. Es una receta sin frituras, ligera y completa, apta también para quienes siguen una dieta hipocalórica o equilibrada. Los huevos aportan proteínas de calidad, las verduras de temporada suman fibra y volumen sin pesar, y la feta da ese toque salado y cremoso que lo hace todo más sabroso. Un plato sencillo, pero nada aburrido, que puedes personalizar cada vez con lo que tengas en la nevera. Y es tan bonito y colorido que parece hecho para subirlo a redes… pero sobre todo, para comérselo enseguida.
Una bandeja, tres ingredientes y cero remordimientos
Este plato nace para quienes quieren una cena inteligente, sabrosa y sin complicaciones. Los huevos se hornean directamente sobre una cama de verduras troceadas: calabacines, pimientos, tomatitos, berenjenas o espinacas… todo vale, siempre que esté bien cortado. La feta se añade al final o directamente sobre las verduras, para que se derrita ligeramente. El resultado es un plato equilibrado, aromático y sin esfuerzo, que sacia sin agobiar. Puedes servirlo como plato único o como segundo acompañado de pan integral o una rebanada de focaccia ligera.
Ingredientes
para 2 personas
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4 huevos medianos
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2 calabacines pequeños
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1 pimiento rojo
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100 g de tomatitos cherry
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80 g de feta light
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1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
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Orégano o albahaca al gusto
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Sal y pimienta al gusto
Preparación
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Lava las verduras y córtalas en trozos pequeños y uniformes.
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En una bandeja con papel vegetal, reparte las verduras con un chorrito de aceite, sal, pimienta y orégano.
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Hornea en horno estático a 200°C durante 10-12 minutos, hasta que empiecen a ablandarse.
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Saca la bandeja y haz 4 pequeños huecos entre las verduras para los huevos. Rompe un huevo en cada hueco.
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Desmenuza la feta por encima, vuelve a meter al horno y cocina otros 8-10 minutos, o hasta que la clara esté cuajada pero la yema siga blanda.
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Sirve enseguida con hierbas frescas por encima o un chorrito de aceite en crudo.
Consejos y variaciones
Puedes usar las verduras que prefieras o que ya tengas cocinadas: calabacines a la plancha, champiñones o espinacas hervidas. Si te gustan los sabores más intensos, añade cebolla roja o aceitunas negras en rodajas. Para una versión estilo “desayuno salado”, incorpora copos de patata o pan duro desmigado en la base. La feta puede sustituirse por ricotta salada, queso de cabra fresco o un poco de parmesano rallado. Y si quieres hacerlo más saciante, acompaña con pan tostado o una crema de legumbres.
Errores que debes evitar
No cortes las verduras demasiado grandes: podrían quedar crudas o tardar mucho más en cocinarse que los huevos. No te pases con la sal: la feta ya es bastante salada. Y cuida el punto de cocción de los huevos: si los dejas demasiado, la yema se seca y queda gomosa. El truco es vigilar bien los últimos minutos y sacar del horno justo cuando la clara esté blanca y firme.
Calorías (estimadas por porción)
Unas 280-300 kcal por persona, con un excelente aporte de proteínas, fibra y grasas saludables.
