Cuando quiero algo ligero pero que me deje satisfecha, pienso enseguida en estas mini tortillas. Son coloridas, sabrosas y perfectas para resolver mil ocasiones: un almuerzo rápido, la fiambrera para llevar a la oficina, un aperitivo ligero o una cena sin tiempo. .
Lo mejor es que se preparan en pocos minutos y se cocinan todas juntas al horno, sin sartén y sin ensuciar demasiado. Las hago en moldes para muffins, así ya salen en formato individual, bonitas a la vista y fáciles de llevar. Cada vez uso verduras diferentes, según la temporada o lo que tenga en la nevera: pimientos, espinacas, cebolla morada, champiñones o calabacines. Con pocas calorías y muchos nutrientes, son ideales incluso para quien está a dieta o busca un plato proteico sin recurrir siempre a la carne.
¿Y lo mejor? También frías están buenísimas. De hecho, a veces las preparo expresamente el día anterior: las guardo en la nevera y aguantan hasta tres días.
Una receta práctica y versátil (que siempre funciona)
Estas mini tortillas se pueden personalizar de mil formas, son ligeras pero saciantes y se adaptan a cualquier estilo alimentario. Añade especias, cambia las verduras o enriquécelas con un poco de queso: el resultado será siempre apetecible y saludable.
Ingredientes
Para unas 6 mini tortillas:
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3 huevos enteros
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100 ml de claras (unas 3 claras)
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1 pimiento pequeño en dados
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Un puñado de espinacas frescas o congeladas
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1/4 de cebolla morada en rodajas finas
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Sal y pimienta al gusto
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Especias al gusto (cúrcuma, pimentón, orégano…)
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1 cucharadita de aceite de oliva virgen extra para engrasar el molde
Preparación
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Precalienta el horno a 180 °C. Unta ligeramente un molde para muffins con un poco de aceite o utiliza cápsulas de papel.
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En un bol, bate los huevos con las claras, ajusta de sal y pimienta y añade las especias.
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Agrega las verduras cortadas: si usas espinacas congeladas, descongélalas bien y escúrrelas.
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Vierte la mezcla en los moldes, llenándolos hasta unos 3/4.
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Hornea durante 18-20 minutos, hasta que estén infladas y doradas. Déjalas templar antes de desmoldar.
Consejos y variaciones
Puedes sustituir las verduras por las que tengas a mano: calabacín, zanahoria, brócoli en trocitos, champiñones o incluso tomatitos. Para una versión más sabrosa, añade dados de queso feta, queso light o jamón cocido picado. Se conservan en la nevera hasta 3 días y también se pueden congelar.
Errores que debes evitar
No llenes demasiado los moldes: el huevo sube al hornearse y podría desbordarse. Evita verduras con demasiada agua (como tomates crudos o calabacines sin escurrir), que harían las tortillas demasiado blandas. No abras el horno durante la cocción: se bajan con facilidad.
