Con esta fantástica receta podréis preparar este famoso plato mexicano de una manera rápida y sencilla. ¡Repetiréis!
¿Te gusta la comida mexicana, pero te da pereza salir de casa? Pues con tan solo unos pocos ingredientes podrás marcarte un riquísimo plato con el que dejarás boquiabiertos a todos tus comensales. Las fajitas de verdura y pollo son unas de las comidas más demandadas de los restaurantes mexicanos, y ahora podrás disfrutar de cada bocado con esta fantástica receta tradicional.
Es una receta sencilla, y no cometerás ningún pecado si te saltas la dieta con ella. Su origen se remonta a la década de los cuarenta, en Texas. Cuando un animal se sacrificaba, los trozos ‘menos ricos’ se les entregaban a los trabajadores, y estos los partían en trozos muy pequeños, los hacían en la parrilla y los envolvían en tortillas de harina o de maíz.
Ingredientes
Ahora, una vez explicado su origen, vamos al lío. Seguro que en cuanto veáis lo fácil que es, iréis lo más rápido posible a vuestro supermercado. Para preparar estas ricas fajitas tan solo necesitaréis:
- Un kilo y medio de pollo.
- Un pimiento verde.
- Un pimiento rojo.
- Una cebolla mediana.
- Dos dientes de ajo.
- Dos botes de salsa mexicana.
- Una cucharada pequeña de pimienta negra molida.
- Una cucharada pequeña de comino molido.
- Una cucharada pequeña de orégano.
- Una pastilla de caldo de pollo.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
- Lechuga.
- Maíz cocido
- Queso rallado.
- Si te gusta mucho el picante, puedes echar una guindilla (opcional).
Paso a paso
¿Ya tenemos todo preparado? ¡Pues manos a la obra! Primero cortaremos todos los ingredientes: el pollo en trozos pequeños, limpiando muy bien la grasa. Después, partiremos en juliana la cebolla, el pimiento verde y el pimiento rojo y trocearemos en trocitos pequeños los ajos.
Posteriormente, en una sartén lo suficientemente grande, echaremos unas 4-5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Y cuando esté caliente, bajaremos la temperatura del fuego a 6 sobre 9, y sofreiremos poco a poco el ajo, la cebolla y los pimientos. A continuación, cuando tengamos el ajo, la cebolla y los pimientos sofritos, subiremos el fuego a 7 sobre 9 y añadiremos el pollo, partido previamente en trozos, y dejaremos que se haga lentamente.
Una vez que desaparezca toda el agua que suelta el pollo y cuando ya esté bien hecho, añadiremos la sal, el orégano, la pimienta negra molida, los cominos molidos y la pastilla deshecha. Para los amantes del picante, este también es el momento de incluir la guindilla. Finalmente cuando esté todo hecho, echaremos los dos botes de salsa mexicana y dejaremos que se haga todo bien, para que se junten todos los sabores.
A la hora de servir, pondremos en cuencos la lechuga partida en trocitos pequeños, el queso rallado y el maíz cocido. Calentaremos las tortitas de maíz al microondas, juntaremos todos los ingredientes, doblaremos y… ¡a disfrutar!
