Si Thor se baña en agua con hielo, por qué deberías hacerlo tú también

En el norte de Europa siempre se ha hecho y esta práctica cada vez se extiende más en el sur por estos motivos. Los actores ya lo hacen.

Sumergirse en agua helada, práctica conocida como crioterapia, aporta una serie de beneficios para la salud insospechados. Más que proporcionar frescor en invierno, aplicarlo en baños corporales puede contribuir tanto a la mejora física como a la mental. Por eso, en el este y norte de Europa siempre lo han hecho. Ahora, esta práctica se lleva a cambio también el sur de Europa y América del Sur.

Por extraño que pueda parecer, una de las mejores cosas que se pueden hacer para acelerar el organismo es bañarse en agua helada ya sea introduciendo hielos en la bañera o sumergiéndose en lagos de montañas. La ciencia ha probado que son muchos los beneficios de realizar esta actividad.

Muchos beneficios en tan sólo tres minutos

Si uno está bañándose con agua helada, entonces la exposición al frío puede acelerar la recuperación muscular. De esta manera, se reduce la inflamación y se alivia el dolor también. Por otro lado, este tratamiento puede aumentar la circulación sanguínea, facilitando una mejor entrega de oxígeno y nutrientes a los tejidos.

Para nuestro cerebro y, en consecuencia, nuestro estado de ánimo, la crioterapia libera la hormona llamada endorfina que eleva el ánimo y reduce el estrés. La sensación de frescura y la respuesta del cuerpo al frío tienen efectos positivos en el sistema nervioso, proporcionando una sensación general de bienestar. Además, algunos estudios sugieren que los baños en agua con hielo pueden activar la grasa marrón con lo que pueden ser eficaces para adelgazar.

En definitiva, bañarse en agua con hielo no solo es una experiencia vigorizante, sino que también demuestra ser beneficioso para nuestra salud: tanto física como mentalmente convirtiéndose en una práctica popular entre aquellos que buscan un modo refrescante y revitalizante para mantenerse en forma y bien. Si bien es cierto hay que hacerlo progresivamente no sobrepasando nunca los diez minutos de baño para evitar entrar en un estado de hipotermia altamente perjudicial que podría llegar a provocar un infarto.