Debemos saber preguntarnos las preguntas adecuadas para tener las respuestas correctas y que nuestra vida vaya lo más encausada posible
En determinados momentos de la vida siempre surgen preguntas que hace que nos cuestionemos el camino que está tomando la carrera profesional que se lleva o incluso la personal. La vida es el cúmulo de pequeñas experiencias que vamos teniendo con el paso de los años que nos hacen aprender y variar, no solo en lo sentimental y emocional sino en lo laboral, económico y social. Por eso es importante llevar a cabo una guía de deberes, por llamarlos de alguna manera, para encontrar solidez en nuestro proyecto vital.
Debemos establecer prioridades dentro de toda la vorágine que conlleva el día a día cargado de responsabilidades, trabajos y vida familiar. Igual que se va al gym para mantenernos en forma en lo físico, la cabeza también necesita de paz para un mejor funcionamiento. El bienestar mental no es un lujo y debes invertir en él para rendir mejor.
Tanto si lideras un grupo humano como si formas parte de él, la empatía debes saber llevarla a gala. Que sea el faro y guía de tu día a día. Esto hará que puedas tener una mayor apertura de mente y que conectes mejor con todos los que te rodean. Respetar ideas y opiniones de todos los que colaboran con nosotros en cualquier ámbito de la vida nos hará mejorar como personas.
Nuestro proyecto de vida necesita visiones claras
Pero ser empáticos no significa sacrificarnos para que todo el mundo tenga que tener una buena apreciación de nosotros. Tenemos que establecer uniones duraderas con las personas que sean afines a nuestros valores y pensamientos, especialmente con las personas que van a estar ahí siempre en los malos ratos.
También debemos aprender a decir NO. Tenemos que saber entender que no podemos siempre contentar a todo el mundo y ello implica que no nos echemos en la mochila más carga de la que tenemos. Una cosa que tenemos que aplicar en el ámbito profesional. Nuestro tiempo vale dinero, y nuestro conocimiento y experiencia también por lo que tenemos que ponerlo en valor.
Es cierto, el dinero no te da la felicidad completa, pero carecer de él tampoco. Hagas lo que hagas debes tener en cuenta que generar economía es importante para tu bienestar futuro, cosa diferente es donde trabajes. Hay que poner en la balanza, si es el caso, tener un trabajo que no nos hace felices, pero nos da mucho rédito, o trabajar donde queremos y no tener pasta.
Son varias las cuestiones que tenemos que poner a discutir en nuestra cabeza para poder tener una vida más placentera y alejada de ruidos innecesarios que hacen que no podamos vivir tranquilos.
