El colchón es el lugar donde más suciedad se acumula de la casa y hay que limpiarlo y desinfectarlo para dejarlo libre de bacterias.
Si queremos gozar de una buena salud, descansar bien es sumamente importante; pero si no tienes la almohada y el colchón lo suficientemente limpios, no podrás descansar correctamente. Existen empresas especializadas en la limpieza de colchones, sofás y el resto de las tapicerías de la casa; sin embargo, no son para todos los bolsillos.
Si no puedes contratar a una empresa de limpieza o simplemente quieres hacerlo tú mismo y no sabes cómo, vamos a explicarte paso a paso el procedimiento y los productos que debes usar. Así, te ahorrarás un dinero y podrás mejorar tu descanso y, por ende, tu salud.
Cómo limpiar correctamente el colchón
Lo ideal es limpiar el colchón en profundidad cada seis meses; por ejemplo, a principios del otoño y de la primavera. Asimismo, debes darle la vuelta o rotarlo, al menos, dos veces al año, para que no coja forma. Y entrando ya en materia, lo primero que has de hacer a la hora de limpiar tu colchón es eliminar aquellas manchas que sean visibles. Para ello, mezcla medio litro de agua tibia y tres cucharadas de detergente líquido o en polvo. Después, con ayuda de una esponja o un cepillo suave, echa un poco de la mezcla y frota realizando movimientos circulares hasta que veas que la mancha ha desaparecido. Eso sí, no mojes demasiado el colchón. Con un trapo seco ve secando la zona, y si notas que sigue algo mojado, puedes usar un secador de pelo.
El siguiente paso que debes realizar, una vez que el colchón esté completamente seco, es desinfectar y eliminar los posibles ácaros. Para ello, tienes que esparcir bicarbonato de sodio sobre toda la superficie. Después, pulveriza agua oxigenada o vinagre por todo el colchón y deja actuar unos 45 minutos. Pasado ese tiempo, hay que volver a rociar el agua oxigenada o el vinagre, frotando con una esponja todo el colchón, hasta que veas que el bicarbonato coge un color marrón, lo que significará que está atrapando toda la suciedad. Finalmente, aspira todos los restos de bicarbonato y, si no puedes dejarlo una hora al sol, sécalo con el secador.
Por otro lado, si ves manchas de orina o de sudor, puedes mezclar agua con limón. Y si observas manchas de vómito, tienes la opción de pulverizar vinagre y dejarlo actuar durante 10 minutos, antes de espolvorear bicarbonato. Cuando ya veas que empiezan a aparecer burbujas, pasa la aspiradora para eliminar todos los restos posibles. Finalmente, para que el colchón esté limpio durante más tiempo, recuerda cambiar las sábanas todas las semanas, ventilar la habitación y sacudir bien la almohada. También es ideal cubrirlo con un protector para protegerlo del sudor y de la suciedad.
