Ha trabajado en Power Ranger, Stranger, Things, Xena, la princesa guerrera, algunos trabajos de Diego Galindo
Diego Galindo es de Sevilla y trabaja para grandes editoriales del mundo del cómics. Realizó una portada para Stranger Things y fue tan buena que se quedó en la editorial para realzar una carrera que sigue siendo imparable. Tiene un agente, y se comunica con sus jefes a través de email. Así es la vida de este ilustrador sevillano, referente en el mundo del cómic y su trabajo.
-¿Cuándo llega todo este boom?
-Mi boom llega con Stranger Things y ha sido sobre todo aquí en España, porque realmente yo en Estados unidos he tenido siempre una muy buena imagen. En las series en las que he trabajado siempre han sido bastante fuertes allí lo que pasa es que aquí o no llegaban, o no se terminaban de publicar. Stranger Things es la primera novela gráfica que hago que tiene una repercusión mundial y una repercusión grande en España. Estamos hablando de una novela gráfica que se publican todos los países.
– Hay algo que no sabía, en el mundo de la ilustración también se necesitan agentes, no solamente para el fútbol.
-Yo tuve muchísima suerte, porque Luis Aramburo, que es mi agente me contacto cuando yo llevaba cuatro o cinco años en la industria. Llegamos a un acuerdo y ese fue un poco nuestro inicio, y de entrada ya me ofreció un trabajo que no pude rechazar.
Stranger Things fue la primera serie mundial para Diego Galindo
-¿Es necesario?
-Es una figura necesaria. Los dibujantes de cómic estamos todo el día encerrados en casa, tenemos muy poco tiempo para socializar, para emplear en redes sociales, para enviar un e-mail y para estar encima de los editores y mostrarnos hacia ellos. Y lo interesante de un agente es que él te muestra a muchos. Y muchos pujan por ti y eso hace que tu valor crezca.
-¿Cómo empezó todo?
-Del primer cómic, no tengo ni conciencia. Sí me acuerdo de la primera vez que me enseñaron algo de dibujo. Yo estaba calcando un cuento sobre Ulises, la Odisea, y mi padre me dijo ‘no calques, cópialo’ y a partir de ahí fue el inicio. Empezaron a caer cómics de todos los colores.
-¿Bellas artes es imprescindible para ser un buen ilustrador?
-No es imprescindible, pero es un gran inicio. En la carrera lo que vas a hacer es probarte. Son años en los que creces y te formas de una manera más amplia. Le da un empuje, no solamente como profesional, sino también como persona. Pero no no es imprescindible tener la carrera para ser un buen ilustrador.
-¿El público quiere cómics?
-El público está demandando cada vez más el cómic. En las carreras universitarias, por ejemplo, que me has preguntado, creo que deberían hacer más hincapié en esa formación porque el público lo está demandando y es un clamor, y en Sevilla también.
-Es curioso que te fiche Stranger Thing.
-Me viene que ni pintado por muchos motivos, pero uno es porque cuando me llega el encargo que no es de la serie completa, sino de la portada, yo tenía una vida muy parecida a los protagonistas de la serie, había como una comunión. Tal fue el entusiasmo que le puse que recuerdo que hice la portada, me la probaron, automáticamente me dijeron que hiciera una prueba para los interiores. Al final me terminaron dando la serie.
-¿Cómo es tu día?
-La comunicación siempre es por e-mail. Es un trabajo muy solitario. Básicamente es levantarte temprano para ir al gimnasio, porque mi trabajo es muy sedentario entonces te descuidas (risas). Llegas, desayunas y te pones durante 10 o 12 horas, dependiendo de los proyectos en los que estés metidos y el tiempo que tengas. También tenemos periodos en los que no hay trabajo y tenemos esa especie de vacío, que muchas veces pienso que ya se acabó todo. Da un susto terrible, pero terminas acostumbrándote.
