La merienda más saludable está al alcance de tu mano por fin. Te enseñamos a preparar un batido de arándanos para chuparse los dedos
Ha llegado 2024 para quedarse, para marcar una nueva páginas en el afamado calendario gregoriano y, con él, han venido acompañados un montón de propósitos con los que nos disponemos a llenar nuestro tiempo libre o bien ascender en nuestro actual puesto laboral, o incluso romper el molde y cambiar radicalmente nuestro día a día. Sea cual sea, uno de los más comunes es cuidar nuestra alimentación. Hoy te traemos una receta idónea para cumplir este objetivo.
Una de nuestras mayores criptonitas a la hora de cambiar la dieta suele ser la fruta. Muchas veces debemos incorporarla con calzador a nuestras comidas en el lugar que antes ocupaban un donuts de chocolate o una taza de natillas. Algunos niños tienen problemas a la hora de tomarla, la mayoría de ellos relacionadas con su textura demasiado blanda. Por eso, los batidos siempre suelen ser una buena alternativa.
El batido de arándanos es uno de los más sabrosos que se pueden elaborar en casa. Para ello, tan solo es necesario conseguir un buen surtido de frutos rojos. Se deben añadir en un recipiente, después se vierte un buen cazo de leche y se remueven todos al mismo tiempo durante unos segundos.
Una vez esté batida la mezcla se debe agregar una pizca de azúcar glass, que puede elaborarse directamente a partir del común siguiendo un procedimiento muy sencillo. Cuando hayamos añadido el azúcar debemos espolvorear unas gotas de zumo de limón, después añadir la mezcla a una licuadora y comenzar a licuar hasta que todo quede suficientemente líquido. El limón no es obligatorio pero aporta al batido ese regusto ligeramente ácido que dota de sabor a muchos postres.
Servir y disfrutar
Cuando hayamos acabado con todo el proceso, tan solo debe guardarse el batido en la nevera durante unos minutos. Cuando haya transcurrido el tiempo, puede retirarse y servirse en un vaso alargado de cristal acompañado de una pajita.
Es importante respetar el tiempo de tan solo unos minutos en la nevera. Bajo ningún concepto debemos introducirlo en el congelador o, de lo contrario, acabaremos con una mezcla sólida y completamente incomestible. El batido de arándanos puede disfrutarse como desayuno o merienda y aporta los minerales contenidos en la frutas con un gasto calórico mucho más pequeño.
