La pasta es uno de los platos más socorridos después del entrenamiento. Te contamos los beneficios que tiene para tu salud
A todos nos ha ocurrido alguna vez. Invertimos más de dos horas en el gimnasio en ejercicios de fuerza muy demandantes de altas cargas, como el press de banca, el jalón al pecho o las sentadillas. Derramamos litros de sudor que compensamos con la ayuda de una gruesa cantimplora que tenemos que rellenar un par de veces durante nuestra estancia en el gimnasio. El resultado salta a la vista: nuestras piernas tiemblan y a aduras penas podemos iniciar el descenso por las escaleras para llegar a nuestra casa.
El estómago nos ruge como un león enjaulado y en ese momento solo tenemos ojos, cabeza e imaginación para una única cosa: la pasta, un buen plato de macarrones con queso rayado por encima, una fuente tan desbordante que apenas pueda distinguirse el suelo de la cocina. Nos vamos a poner las botas. ¿A qué se debe esta fijación por la pasta después de una sesión intensa de ejercicio?
La respuesta es bien sencilla. Justo después de llegar del gimnasio, nuestro cuerpo experimenta una sensación llamada catabolismo por la que los músculos se rompen y liberan una gran cantidad de energía que han empleado en el entrenamiento. Así, nuestro cuerpo nos pide, o más bien nos exige, recuperar esa energía perdida. La forma más fácil de hacerlo es a través de la ingesta de carbohidratos como la pasta, que suele ser amiga incluso de los paladares más refinados y que no resulta difícil de preparar. Además, como es bien sabido, puede realizarse en una amplia variedad de colores y sabores y acompañarse de otros alimentos como guarnición que le aporten aún más nutrientes de los que ya posee de serie. Estos son algunos de ellos.
Los beneficios
La pasta cuenta con una gran cantidad de beneficios para la salud, siendo uno de los principales el número de carbohidratos que contiene. Los carbohidratos proporcionan un subidón de energía de forma rápida, casi instantánea, que nos ayuda a reponer fuerzas después del desgaste físico del gimnasio.
Finalmente, aunque desde muchos otros sectores se afirme lo contrario, lo cierto es que la pasta no engorda, sino que contribuye a mantenernos en nuestro peso saludable y crucial para lograr un buen rendimiento a nivel deportivo.
