Los expertos advierten sobre el peligro de los aparatos de bronceado artificial para la salud del ser humano.
Los expertos son sumamente claros con respecto a las camas de bronceado: no sólo no preparan la piel para la exposición prolongada al sol sino que dada la intensidad a la que trabajan son perjudiciales para el ser humano, aumentando el riesgo de sufrir cáncer de piel.
En determinados círculos sociales es muy habitual acudir a las camas de bronceado para ponerse moreno, en especial en esos momentos en los que la temperatura aún no es propicia para ir a la playa y tomar el sol. Pues bien, los expertos dejan claro una vez más que este tipo de bronceado artificial no prepara a la piel para su exposición al sol y además puede generar cáncer de piel.
Las cabinas de bronceado emiten radiación ultravioleta a gran intensidad, mucho más alta que la de la radiación solar, lo que hace que el riesgo de que aparezca cáncer de piel es mayor. En ese sentido Patxi García, miembro de la Asociación Española Contra el Cáncer, remarca la necesidad de que la sociedad conozca que «las cabinas bronceado son cancerígenas, por lo que el riesgo de desarrollar un cáncer en la piel es muy elevado y deberían ser evitado al máximo». De igual forma, la Organización Mundial de la Salud califica a estos aparatos bronceadores dentro del grupo 1 como ‘cancerígenas para el ser humano’. Para hacernos una idea, la OMS las sitúa en el mismo nivel que el tabaco.
Las cabinas de bronceado no activan la Vitamina D
Así las cosas, los expertos también aclaran porque las camas de bronceado no preparan la piel para la exposición solar. Este tipo de aparatos contribuyen al fotoenvejecimiento de la piel y a la activación de la melanina antigua, no activando la vitamina D, el mayor beneficio de tomar el sol. En ese sentido, los expertos remarcan que «las cámaras de bronceado no preparan la piel para la exposición solar, al contrario, lo que están haciendo es dañar la piel y la salud».
A la vista de todo lo anterior no parece muy recomendable buscar un bronceado artificial por esta vía ya que no sólo no es bueno para la salud, sino que no prepara a la piel para los riesgos de tomar el sol.
