Te mostramos cómo hacer de forma sencilla unas ricas albóndigas en salsa. En menos de 40 minutos y con todos los sabores.
Llega el frío y las albóndigas es un plato exquisito que se empieza a repetir más a menudo en los hogares. Si bien son de origen árabe, su consumo ya se esparció por el resto del mundo. Eso sí: no todos las preparan de la misma manera y cada uno le agrega un toque característico, lo que se suele definir como una mano mágica.
En este artículo, te enseñaremos cómo elaborar unas buenas albóndigas en salsa. Todo en menos de 40 minutos. Sí, ese es el tiempo que necesitarás para destacarte en la cocina e impresionar a tus seres queridos. Presta atención a la receta para llenar tu casa de sabores y ganarte así todas las felicitaciones correspondientes.
La receta especial para las albóndigas en salsa
Como ya aclaramos, necesitarás menos de 40 minutos para preparar unas exquisitas albóndigas. Primero, como siempre, a prestar atención a los ingredientes. Todo esto necesitarás si pensamos en raciones para cuatro personas: 750 gramos de carne picada (puede ser de cerdo, de ternera o mixta, como prefieras o lo que te cueste más barato), dos huevos, 150 gramos de pan de molde, una cucharada de perejil fresco picado, tres dientes de ajo, 100 mililitros de leche, harina de trigo para la salsa y, también, para rebozar las propias albóndigas, dos cebollas, una zanahoria, 500 mililitros de caldo de pollo, 200 mililitros de vino blanco, sal, pimienta negra y aceite de oliva virgen extra. Parece mucho, ¿verdad? Tranquilidad…
Si ya tenemos todo, empezamos la elaboración. El primer paso será picar un diente de ajo y agregarlo a un bol con la carne, los huevos y la miga de pan que debe estar remojada en la leche. Sumamos también una cucharada de perejil picado y un poco de sal. Luego mezclamos los ingredientes, buscando obtener una masa homogénea. Así logramos formar las albóndigas y las pasamos posteriormente por harina.
En el segundo paso, debemos freír las albóndigas, intentando que se doren. Las quitamos y las dejamos en un plato con papel para que absorban el aceite. El tercer paso consiste en preparar la salsa. Picamos los dientes de ajo, las cebollas y la zanahoria. Insertamos todo en una sartén a fuego medio. Un poco después, sumamos una cucharada de harina, el vino y vamos removiendo. Más tarde, añadimos el caldo de pollo y dejamos cocinar todo (con la verdura incluida) unos 15 minutos.
Así llegamos al cuarto y último paso. Cogemos una batidora y trituramos la salsa. Luego la pasamos a una cacerola. Sumamos también las albóndigas y dejamos que todo se cocine durante cinco minutos. Sólo nos queda ahora disfrutar de la comida.
